Porque no estamos luchando contra fuerzas humanas, sino contra las fuerzas espirituales y sobrehumanas del mal, que dominan y gobiernan este mundo de tinieblas.El salmista confía en que Dios lo defenderá y lo protegerá de sus enemigos, y apela a la justicia divina para que se haga Neutralidad y se castigue a los malvados.Que este Salmo 35 de la